Últimamente no escribo mucho.

Y no es por falta de ideas, ya que tengo un bloc de notas donde tengo varias ideas de entradas e incluso borradores del texto que me gustaría escribir en ellas.

Pero es que me he dado cuenta de que simplemente no soy capaz de escribir cuando no se dan las circunstancias apropiadas.

Y eso que puedo programar software cansado, incluso medio dormido, pero no puedo escribir. Puedo programar software cabreado, pero no escribir. Puedo programar software preocupado, tenso o estresado.

Pero no puedo escribir.

Como estudié ciencias en lugar de letras, y luego hice ingeniería en lugar de literatura, supongo que mi cabeza se ha acabado acostumbrando al pensamiento racional y escribir es un poco… otra cosa.

Lo bueno es que cuando recupero la compostura, las cosas se relajan, y el trabajo afloja, entonces puedo volver a escribir. Algo se desconecta, de nuevo me resulta sencillo hacerlo, y es cuando vuelvo a descubrir que me resulta enriquecedor y estimulante.